El juego es especialmente importante hasta los tres años de edad, dado que en ese periodo de tiempo los niños juegan menos entre sí y prefieren a sus padres. En esta línea, diversos estudios demuestran que las familias que han hecho del juego una base de unión en la infancia han tenido menos problemas en la turbulenta etapa de la adolescencia. Así pues, los expertos recomiendan a los padres dedicar al menos media hora diaria a jugar con sus hijos. Pero se pueden tener muy buenas intenciones y no saber cómo hacer ese encuentro atractivo y beneficioso.
"Un informe publicado por la Academia Americana de Pediatría (AAP) destaca que el juego permite a los niños expresar su creatividad y desarrollar su imaginación, su destreza manual y sus aptitudes físicas, cognitivas y emocionales, por lo que es importante para el desarrollo saludable del cerebro. Entre las virtudes del juego destaca también que cuando se juntan varios niños aprenden a trabajar en grupo, a compartir, negociar, resolver conflictos y a defender sus puntos de vista. Y cuando tienen ocasión de jugar con sus padres, los niños perciben que los adultos les prestan toda su atención y contribuye a construir relaciones duraderas."
El juego duplica la capacidad de concentración y de memoria del niño, por lo que el aprendizaje resulta más sencillo cuando realiza este tipo de actividad.
El juego es pues clave para el desarrollo de los niños, sobre todo en las edades más tempranas, y es recomendable hacerlo en compañía de los padres. Como ya hemos comentado, cuando los pequeños juegan agudizan sus sentidos -el tacto, la vista y el oído son básicos para ellos-, agilizan el movimiento de pies y manos, y fortalecen su capacidad mental. Pero esta actividad no sólo debe ser un mero entretenimiento, sino que ha de cumplir dos objetivos: convertirse en uno de los principales hilos conductores del amor entre padres e hijos y, al mismo tiempo, tener una vocación educativa. Para que esto sea posible, el padre y la madre deben aprender a jugar correctamente con los niños.
"Un informe publicado por la Academia Americana de Pediatría (AAP) destaca que el juego permite a los niños expresar su creatividad y desarrollar su imaginación, su destreza manual y sus aptitudes físicas, cognitivas y emocionales, por lo que es importante para el desarrollo saludable del cerebro. Entre las virtudes del juego destaca también que cuando se juntan varios niños aprenden a trabajar en grupo, a compartir, negociar, resolver conflictos y a defender sus puntos de vista. Y cuando tienen ocasión de jugar con sus padres, los niños perciben que los adultos les prestan toda su atención y contribuye a construir relaciones duraderas."
El juego duplica la capacidad de concentración y de memoria del niño, por lo que el aprendizaje resulta más sencillo cuando realiza este tipo de actividad.
El juego es pues clave para el desarrollo de los niños, sobre todo en las edades más tempranas, y es recomendable hacerlo en compañía de los padres. Como ya hemos comentado, cuando los pequeños juegan agudizan sus sentidos -el tacto, la vista y el oído son básicos para ellos-, agilizan el movimiento de pies y manos, y fortalecen su capacidad mental. Pero esta actividad no sólo debe ser un mero entretenimiento, sino que ha de cumplir dos objetivos: convertirse en uno de los principales hilos conductores del amor entre padres e hijos y, al mismo tiempo, tener una vocación educativa. Para que esto sea posible, el padre y la madre deben aprender a jugar correctamente con los niños.Tenia tiempo que no me divertia tanto como una niña pequeña, sin gastar dinero, y lo unico que inviertes es el tiempo, pero vale la pena.
Antes de que naciera Mosiah, mi hija y yo teniamos un vinculo de amigas, jeje, ella decia que eramos amigas del dedo chiquito, simpre haciamos promesas y las pactabamos dandonos el dedo meñique. Teniamos salidas de chicas, es decir un dia a la semana o una vez al mes yo era solo para ella, mi esposo ya sabia; asi que ese dia el estaba solo, bueno!, se ba a trabajar. Trataba de pasar el tiempo con ella, jugar salir apasear, al cine, a museos y comiamos ya sea que la invitra a comer, o bien de pinic en algun parque.
Ella aprovechaba al maximo todo, y yo gozaba, y teniaos la oportunidad de conocernos, de platicar sus miedo, inquietudes, y muchas cosas.
Cuando Mosiah nacio el tiempo se me acorto, y vino la adaptacion ella no lo recintio al principio fue su adoracion (aclaro lo sigue siendo), pero mi tiepo con ella ya no fue exlusivo, ya no hay tantas salidas como antes, asi que ella me dejo de contar cosas, y nuestra relacion era no de calidad, hasta que dije ¡basta es hora de jugar! y la verdad ya no vamos tan lejos, pero salimos al parque mas cercano a jugar o enfrente de la casa, o en la misma casa, y asi relaciono a su hermano con ella y ella con su hermano, ahora hasta el papa, y la abuela juegan con ella, y que divertidas nos damos.
Quieres ver mas la importancia del juego :
http://www.familiaescolar.com/an_06.html
Libro recomendado a Leer : “Todo un mundo de sorpresas“, asegura que “no importa tanto la cantidad (de juego) como la calidad”.
